Imaginen un trabajo en una isla alejada del bullicio y el trajín de las grandes urbes. Rodeada por un mar tan azul y cristalino que se llega a confundir con el cielo. Seguramente, para muchos, este podría ser el lugar ideal para cualquier trabajo.
Pero, ¿qué pasa si la labor encomendada es encontrar a una psicópata que se ha escapado de una cárcel de máxima seguridad para enfermos mentales que harían ver a los doce apóstoles de Sierra Chica más inofensivos que los Teletubbies?
Quien no lo piensa dos veces es el agente federal Teddy Daniels (Leonardo DiCaprio) que, junto a Chuck Aule (Mark Ruffalo) y a pesar de su pánico al agua, se embarca rumbo a Shutter Island. Su misión es encontrar a Rachel Solando (Emily Mortimer), una peligrosa reclusa que se ha fugado de Ashecliffe, el centro penitenciario de alta seguridad para personas a las que les faltan algún que otro jugador.
Como si esto fuera poco, y para hacer más amena la estadía, un huracán castiga a la isla por lo que el lugar queda incomunicado y los “locos lindos” se escapan de sus celdas. La tempestad parece azotar no sólo a Shutter island ya que, a medida que pasa el tiempo, comienzan a aflorar algunos traumas que atormentan a Teddy: su experiencia como soldado en la Segunda Guerra Mundial y el recuerdo constante de su esposa muerta.
Así, poco a poco, Daniels se adentra en los oscuros y tenebrosos secretos que guarda la isla, de los que difícilmente logre salir intacto.
El regreso de un dúo dinámico
A pesar de su confeso fanatismo por el cine de terror, Shutter island (La isla siniestra) representa la primera incursión de Martin Scorsese en el género, y, como era de esperar, nadie mejor que el baby face DiCaprio para interpretar el rol protagónico.
En este caso, la dupla Scorsese-DiCaprio sorprende con un thriller psicológico que atrapa lentamente al espectador en los tormentosos laberintos de la mente, donde no todo es lo que parece y a veces lo evidente no es tal.
El filme es la adaptación de una novel a del escritor estadounidense Dennis Lehane. Esta no es la primera obra de este autor que ha sido adaptada para el cine: Gone, baby, gone (Desapareció una noche) dirigida por Ben Affleck y Mystic River (Río místico) del gran Clint Eastwood, hablan de la capacidad cinematográfica de Lehane.
En épocas en que muchos sufren del síndrome post-Lost, es hora de ahogar las penas y darse una vuelta por otra islita que se las trae…
Ficha técnica
Dirección: Martin Scorsese
Guión: Laeta Kalogridis (guión); Dennis Lehane (novela)
País: Estados Unidos
Duración: 138 min.
Reparto: Leonardo DiCaprio (Teddy Daniels), Mark Ruffalo (Chuck Aule), Ben Kingsley (Dr. Crawley), Max Von Sydow (Dr. Naehring), Michelle Williams (Dolores Chanal), Emily Mortimer (Rachel 1), Patricia Clarkson (Rachel 2), Jackie Earle Haley (George Noyce), Ted Levine (Warden), John Carroll Lynch (Deputy Warden McPherson).
Fuentes: Revista La Cosa Nº162 // imdb.es
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